Artículo sobre Abraham Moscardó, publicado en el periódico italiano Affaritaliani.

Affaritaliani.it 4 de Septiembre Abraham, dalla Spagna l'esordio del nuovo Dalì Venerdí 04.09.2009 11:00 Magritte, De Chirico e Dalì. Sono i grandi maestri di riferimento di un giovane pittore, Abraham Moscardò Saèz, che inizia a muovere i suoi primi passi nel mondo dell'arte in Spagna, ad Alicante. E' giovane ma il suo talento non lascia indifferenti. Nato a Orihuela (Alicante) nel 1984, è qui che Abraham inizia la sua formazione nella Scuola di Belle Arti. Nel 2008 ottiene la laurea ad Altea. Ma la sua è una vocazione che scopre da piccolo, quando inizia a mostrare un grande interesse per la pittura e il disegno. Si definisce un pittore surrealista e nei suoi quadri elabora un gioco cromatico che ricorda i "grandi" maestri come Velàzquez e Goya. Ma le sue opere si allontanano dal classicismo dei pittori spagnoli per lasciare libera l'immaginazione. Numerosi i visitatori che hanno potuto apprezzare le sue opere nella mostra itinerante ImpresionArte, che molto presto potrebbe varcare i confini ed arrivare in Italia.

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Sabato, 5 settembre 2009 - 08.00:00

ImpresionArte en Santa Pola

La gira ImpresionArte siguió su marcha en el verano de 2009 en Santa Pola. La inauguración tuvo lugar el 17 de agosto a las 19:00 horas en la Sala de Exposiciones de la Casa del mar. Av. Fernando Pérez Ojeda nº 21.

Libertad amenazada

Libertad amenazada
2009.
50 x 70 cm.

Tinta y carboncillo sobre papel.

Primera aparición en público: Exposición individual "ImpresionArte", en la sala de exposiciones Cuevas del Rodeo, Rojales (Alicante). Año 2009.

El vuelo de un pequeño pájaro está amenazado por dos manos deformes creadas por una acumulación de jabón.

Serie del Big Bang

Big

2009

100 x 73 cm.

Técnica Mixta

Bang

2009

50 x 70 cm.

Técnica Mixta

Movimiento artístico: Expresionismo abstracto.

Características: Pintura gestual y matérica, automatismo, improvisación pictórica.

Primera aparición en público: Exposición individual "ImpresionArte", sala de exposiciones Cooperativa Eléctrica de Callosa de Segura (Alicante). Año 2009

Esta pequeña serie de dos cuadros representa el Big Bang, el mismo fenómeno cosmológico que dio origen al universo, pero en éste caso, no se trata del universo que conocemos, sino el Big Bang que tuvo lugar en el interior de Abraham Moscardó, donde se originaría otro mundo independiente del físico, un mundo creado por lo onírico, la fantasía, y que se materializaría con el Arte. 

Un mundo nuevo donde la realidad no sigue el orden natural de las cosas, y donde el Génesis tradicional se vio alterado,  Adán y Eva tuvieron un castigo diferente al que narra la Santa Biblia, donde aparecen ángeles a orillas del mar, donde las esculturas cobran vida y sangran como organismos vivos, un universo donde las marionetas se enamoran, donde los fantasmas nos visitan y posan para ser representados en el nuevo siglo. Un universo que sólo podrá ser contemplado por los pinceles de Abraham Moscardó.

El pintor de la rosa marchita

El pintor de la rosa marchita

50 x 70cm.
Tinta, lápices y carboncillo sobre papel
2009

Tímido y muy callado,
así es Arturo,
un niño de piel pálida, delgado,
con grandes ojeras y de cabello oscuro.

Es un niño muy particular,
no tenía ilusiones ni con grandes cosas soñaba,
pero tenía una inquietud muy singular,
mostraba interés por los cuadros que Goya pintaba.

Arturo no tardó en hacerse pintor,
paisajes, retratos o bodegones eran cosas que nunca pintaba,
solo oscuros lienzos llenos de horror,
cuadros que asustaban ante quien los miraba.

Cada día por cementerios y lugares solitarios se paseaba,
en busca de inspiración y tranquilidad.
La tristeza, la enfermedad y la muerte siempre pintaba,
pues esos temas eran su especialidad.

Su madre ya no sabía que hacer
ya que loco su hijo se estaba volviendo,
y aunque aún no se lo podía creer,
lloraba porque en verdad lo estaba viendo.

Y a su locura quiso ponerle solución,
quería que su hijo en bellas cosas pensara,
puso una bella rosa en su mejor jarrón,
luego le convenció para que lo pintara.

Sin pensarlo Arturo con entusiasmo obedeció,
pues una rosa en su jarrón representó,
pero no como su madre esperaba,
ya que pintó la rosa cuando se marchitó.